“Cómo me pesas mamá…”
Siente esta frase. Déjala que vibre en todo tu ser. ¿Dónde en tu cuerpo la sientes? ¿Dónde cargas a tu mamá y porqué o para qué?
Siguiendo con el tema de los problemas de peso, hoy quiero hablarte de la importancia de tu madre en tu vida y su relación con tu sobrepeso o tu falta de peso.
Como ya expliqué en artículos anteriores (ve al Blog de esta página), tanto el sobrepeso como el déficit de peso no son otra cosa que una serie de memorias dolorosas que no te has permitido resolver y que el cuerpo encapsula en forma de grasa a fin de que puedas verlas, sentirlas y liberarlas (en el caso de déficit de peso, el cuerpo se resiste a retener la grasa, que es lo mismo que negarse a retener la protección y la presencia de mamá).
La pregunta fundamental es: ¿de dónde provienen esas memorias? De tus padres y ancestros, particularmente de tu mamá, y aquí quiero hacer una aclaración: una cosa es la persona que tu mamá es o fue y otra muy distinta la forma en que tú viviste, percibiste e interpretaste a tu madre. Tu madre, al igual que tú, vivió con una serie de memorias, heridas y cargas que no pudo resolver y que seguramente proyectó en ti inconscientemente, pero quiero que entiendas que, en el fondo, tu mamá hizo lo mejor que pudo con las herramientas que tenía a la mano y que la forma en que te demostró su amor, fue aquella que a ella le enseñaron y así fue perfecto, no pudo haber sido diferente porque de hecho, es por como ella era y por todas las cargas que ella llevaba antes de concebirte, que tú la elegiste como tu madre. Sí, tú la elegiste, y ella te dio la vida, ella quizá tuvo la oportunidad de abortarte y no lo hizo, te dejó en la vida, y eso es más que suficiente.
Desafortunadamente, la realidad es que nuestra interpretación de nuestra madre y de nuestra relación con ella está llena de juicios, conclusiones, proyecciones y expectativas que nos pesan mucho a nivel emocional y ese peso emocional puede llevarnos a desarrollar un problema de peso, un exceso o déficit de grasa alrededor de nuestros cuerpos que, inconscientemente, nos permita sentir que se están satisfaciendo ciertas necesidades emocionales que mamá no pudo o no supo cómo satisfacer.
Veremos ahora algunas de esas necesidades o fines del sobrepeso y del déficit de peso y la forma en que cargas a tu madre a través de ellas:
1. Protección: “Cómo me pesas mamá, cómo me pesa que no me hayas protegido, que no hayas podido estar ahí para mí; mi sobrepeso es la única forma que tengo de sentir tu abrazo, tu contención y tu protección/ mi falta de peso es lo que me permite tener la agilidad de huir cuando me siento amenazado”.
“Cómo me pesa que nunca me vieras como realmente soy, que nunca reconocieras mi valor y mis capacidades; con mi sobrepeso he tratado de hacerme grande para que me veas, me reconozcas y me protejas de los juicios del mundo/ con mi falta de peso me anulo a mí mismo, tal como me sentí anulado por ti”.
“Cómo me pesa que no me hayas defendido en aquellas ocasiones en que otros me dañaron; mi sobrepeso es la armadura con la que ahora yo me protejo y me defiendo de los demás/ mi falta de peso es la forma en que me hago invisible ante los demás”.
“Cómo me ha pesado verte débil, enferma o indefensa; mi cuerpo se ha hecho grande para poder protegerte a ti/ mi cuerpo se ha hecho pequeño para reflejar la forma en que te veo”.
“Cómo me pesa que no dieras la cara por mí, que no evitaras que la gente me juzgara o me rechazara; ahora uso mi sobrepeso como pantalla para que nadie me conozca realmente/ ahora uso mi falta de peso para que nadie me vea”.
“Cómo me pesa haber crecido sintiendo que necesitaba salvarte, sanarte o ayudarte de alguna forma; ahora llevo en mi cuerpo todas las capas de protección que no pude darte a ti/ mi falta de peso es la forma en que reflejo que no quiero estar en este mundo sin ti.”
2. Espacio: “Cómo me pesas mamá, cómo me pesa que no pudieras hacerme un espacio en tu cuerpo sin sentir que te invadía o te robaba tu belleza y tu juventud; mi sobrepeso es la forma en que trato de que me hagas más lugar en tu vida/ mi falta de peso es la forma en que trato de desaparecer de tu vida, de devolverte tu espacio”.
“Cómo me pesa que invadieras mi espacio constantemente y que no confiaras en mí; con mi peso he buscado hacerme más grande que tú para poder oponerme a tu sobreprotección/ con mi falta de peso he buscado esconderme o huir de ti”.
“Cómo me pesa haber sentido que perdiste tu vida, tu carrera, tu cuerpo y tus sueños por mí, que vine a invadir tu vida; mi sobrepeso es la forma en que busco hacerme mi propio lugar en el mundo/ mi falta de peso es la forma en que me castigo por lo que te hice, mi recordatorio de que no merezco existir”.
“Cómo me pesa haber tenido que ocupar el espacio vacío que dejó xxxx (papá, la abuela, mi hermano, etc.); en mi cuerpo cargo el peso de toda esa responsabilidad que me vino con un espacio y un rol que no eran míos/ mi cuerpo prefiere desaparecer antes que cargar con todo eso”.
“Cómo me pesa sentir que tuve que competir por tu atención, tu mirada y tu cariño; creí que haciéndome grande por fin podría ocupar el primer lugar para ti/ creí que haciéndome pequeño dejaría de estorbarte.”
3. Aceptación, amor y presencia: “Cómo me pesas mamá, cómo me pesó saber que esperabas a un hijo de diferente sexo; con mi sobrepeso trato de parecerme al hombre/mujer que siempre quisiste tener/ con mi falta de peso trato de seguir pareciendo el niño(a) al que no pudiste aceptar”.
“Cómo me pesa la forma en que miraste y juzgaste mi sexualidad; ahora uso mi cuerpo como una barrera para alejar a aquellos que quieran seducirme o tocarme/ ahora uso mi cuerpo como un grito desesperado para que alguien me abrace y me toque.”
“Cómo me pesa haber creído que te sentías amenazada por mí cuando alcancé la pubertad y era delgada y atractiva; con mi sobrepeso trato de mostrarte que nunca seré mejor ni más, delgada ni más hermosa que tú / con mi falta de peso trato de seguir compitiendo contra ti”.
“Cómo me pesa haber sentido tu mirada reprobatoria cuando quise lucir mi cuerpo y mi belleza; mi sobrepeso es la forma en que aprendí a esconderme y a evitar esa mirada/ mi falta de peso es la forma en que trato de pasar desapercibida ante tu mirada”.
“Cómo me pesa sentir que me abandonaste, que no estuviste ahí para mí cuando más te necesitaba; en mi cuerpo llevo cargando el peso de tu presencia para sentirte cerca de mí/ en mi cuerpo muestro tu falta de amor y presencia en mi vida”.
“Cómo me pesa sentir que puedo perderte, que te me estás yendo; retengo los líquidos y la grasa en mi cuerpo para no dejarte ir, para retener la vida y el amor que me vienen de ti/ no logro retener las calorías de lo que como porque siento que no puedo retener tu calor”.
“Cómo me pesa recordar que sólo eras feliz cuando me veías comer; sigo comiendo para hacerte feliz mamá/ he dejado de comer o de asimilar la comida para ver si así vienes tú a nutrirme”.
“Cómo me pesa recordar las veces en que me sentí rechazado e ignorado por ti; mi peso me ayuda a hacerme un escudo contra el rechazo de los demás, particularmente de aquellos a quienes amo o quiero que me amen/ mi poco peso me ayuda a salir corriendo antes de ser herido”.
“Cómo me pesa haber sentido que sólo podías amarme si era delgad@; estoy usando mi sobrepeso para rebelarme contra ti, para nunca darte el gusto de verme tan flac@ como querías que fuera/ estoy usando mi falta de peso para ver si así, por fin, te hago feliz“.
Lo dejaré hasta aquí porque estoy segura de que hay muchas cosas y emociones moviéndose en ti en este momento. En un artículo posterior hablaré de las demás necesidades y formas en que cargamos a mamá.
Mamá es la base de todo, el principio de la vida, la fuente de la abundancia, la salud, la belleza y el amor, sin ella no seríamos nada, no estaríamos aquí, y tenemos que aprender a tomar a nuestra madre tal como es, tomar de ella la vida al precio que a ella le costó y que a ti te ha costado. Pero para poder tomar a mamá, hay que hacer espacio, hay que tener el valor de mirar esas heridas, de limpiarlas, de sanarlas y de dejarlas en el pasado, para poder avanzar ligeros hacia la vida sabiendo que tuvimos todo el amor que necesitábamos: el amor que todo lo es y nos dió la vida a través de mamá.
Si te gustó no te olvides de compartir y de dejarme tus comentarios.